En “El Mar y La Serpiente”, aparece la literatura como una forma de liberación. La ficción cumple la función de ayudar a la protagonista a expresar sus ideas y sentimientos respecto al tema de los desaparecidos y especialmente expresar los pensamientos y emociones acerca de la desaparición y muerte de su padre.
La chica, tomo una decisión: escribir la composición no solo para cumplir con una tarea escolar; sino que hay algo mucho más profundo: la escritura se vuelve un medio para canalizar, liberar y dar sentido a la historia de su padre que ella fue reconstruyendo en su interior, a pesar de los miedos de su madre y de los sucesos que no podía recordar.
Entonces, creo que la escritura, sirve a las personas para dos significados a sus vidas y a la de los otros. Sin embargo, para ponerse a escribir, la chica debió vencer sus miedos y tomar la decisión. Porque además, otros conocerían su historia familiar.
En esta novela se puede ver como la escritura no es un pasatiempo sino una forma de exteriorizar cosas que a veces nos animamos a hablar con otras personas, porque la protagonista logra expresar que piensa sobre los desaparecidos y el dolor y el reconocimiento que siente por su padre.
Creo que muchas veces cuando no podemos o no nos animamos a decir algo podemos escribirlo. A veces es más fácil comunicar algo a través de una carta, un mail o un mensaje. Incluso cuando escribimos en un diario intimo, la escritura nos sirve para liberar nuestras emociones.
Me parece interesante que Paula Bombara cite un fragmento del “diario de Ana Frank” porque en el caso de Ana la escritura fue un modo de soportar mejor la terrible realidad que le tocó vivir en tiempos del holocausto.
En conclusión, la escritura y la literatura pueden convertirse en una buena forma para expresar el mundo interior, nuestros grandes problemas, dudas y temores. Liberamos de ellos, sacarlos de nuestra alma y volcarlos en la escritura.
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