11.12.2011

Gran falta de apoyo


Al leer el libro, Los ojos del perro siberiano, me encontré con un tema que se vive diariamente en la sociedad y que también me hizo sentir identificada ya que a un familiar le ocurrió algo parecido.
En el libro es mencionada la situación en la que se encuentra Ezequiel. Este se había ido de la casa porque su novia había quedado embarazada y el padre de la chica quería obligarlo a que se case con su hija. El no aceptó y decidió irse de su casa.
Este suceso me identifica mucho ya que a mi hermano le paso algo parecido. Conoció a una chica con la cual se puso de novio al mes. El no tenía una buena relación con mi mamá. Vivían peleando cada momento del día y uno de los motivos era mi cuñada ya que tampoco se llevaban bien. Mi hermano cansado de la situación decidió irse se mi casa sin importarle que no tuviera trabajo, casa, alimentos, etc.
Al pasar dos o tres meses, fui a ver a mi hermano y me conto que iba a ser papá. Estaba muy contento, pero seguía sin tener plata para alimentos, una casa… solo tenía trabajo en la carpintería de mi abuelo. Esto lo ayudó un poco pero su sueldo no bastaba para satisfacer sus necesidades y menos para cubrir los gastos que produce la llegada de un bebé.
Finalmente mi hermano volvió a vivir en mi casa con la novia y después de nueve meses, con su hija.
Cuento esta historia como un ejemplo, una experiencia de vida. Creo que el apoyo en este tipo de situaciones y en otras, es fundamental para poder seguir adelante y evitar errores. Lo que menos necesita una persona al enfrentarse con este tipo de situaciones es que la dejen de lado, que no la entiendan, que no la escuchen. En fin, a todos nos podría pasar.

Como se habló en una de las clases de lengua y como una opinión mía, no hay que juzgar a la gente por algunos sucesos o algunos errores que cometen en sus vidas ya que nadie sabe el motivo por el cual sucedieron las cosas. Creo que si vamos a hablar, tenemos que hacerlo para ayudar a las personas y no para criticarlas.

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